Alice was beginning to get very tired of sitting by her sister on the bank, and of having nothing to do...

martes, 9 de septiembre de 2008

Regresiones

Hay momentos en los que uno, sin elegirlo, viaja al pasado, situaciones sensaciones, roles y comportamientos... Hoy pasó: mi amiga, con la que me crié como si fuera mi hermana pequeña y yo nos juntamos, cosa poco extraña que ,aunque poco frecuente, no deja de ser de lo más normal. Lo realmente novedoso fue que mi mamá y la suya también se sumaron a la cita ¡cómo en los viejos tiempos!
En realidad ellas fueron las dos amigas en el principio de la creación pero ocurren esas cosas de la vida, que los niños, aún cuando hayamos crecido y entendamos, preferimos no darnos por aludidos. Era capaz de ver una excitación extraña entre nosotras, que por supuesto agarrábamos y sujetábamos dentro de nuestra apariencia de mujeres adultas... Pero sí... mi amiga y yo atrás en el coche murmurando palabras secretas sobre los niños que nos gustan, risa tonta y nerviosa... Hablamos de lo puto que es el amor, cuando te entra de ese modo en el que dejas de controlar la situación, cuando te tiemblan las piernas estúpidamente al verlo pasar y ese revoltijo que queremos llamar “mariposas en el estómago”, pero que más bien se parece a la más horrorosa descomposición, hace que tu lengua vaya por su cuenta y parezca que has estado bebiendo a deshoras o que tienes trastornos de desarrollo en el habla. Luego está la risa simple que usas como escudo... que te crees tú que te hace simpática y jovial, como por encima de todo, jaaaa! Todos sabemos que no... pero al menos a veces ayuda (siii?) a disimular la incapacidad de mirarle a los ojos; temes que si lo hicieras te quedarías ahí colgada y no podrías salir ya nunca... perdida en sus ojos. En un autismo feliz. Por otro lado, también lo evitas porque te sientes tan transparente y desnuda que sabes que en cuanto vuestras miradas se crucen, será totalmente evidente que mueres por sus huesos. El que te guste tanto una persona te hace desvariar y claro, te deja desprovista de todo razonamiento lógico. Todo lo que haces, piensas y dices carece de lógica y aún sabiéndolo, no eres dueña de ti misma... y encima hay que disimular, es decir “comportarse” como personas normales, mujeres seguras y dueñas de sí mismas... (?) cuando lo que tú quieres hacer es volver al patio de la guardería, tirarle del pelo y echar a correr...
Nuestras mamis delante deslizándose en su conversación, ellas también "regresionan", no os vayáis a pensar que soy sólo yo, no... en la risa cómoda y cómplice de dos amigas que se vuelven a encontrar y dejan a un lado aquel asunto, una tarde banal, sin complicaciones ni terrenos fangosos.
Cierto es que el grupo despertaba en cierto modo la curiosidad de los que lo rodeaban y bajo el tácito acuerdo de normalidad, yo al menos sentía que aquello era un juego desde el principio, divertido en cierto modo, sí.
Nada evitó que nos enamoráramos de esos zapatos verdes con pulserita al tobillo... como niñas jugando a ser mayores: un poquito de tacón. De acuerdo, esta es otra regresión y os seré franca, me pasa siempre que compro zapatos, me vuelvo pequeña y quiero enseñárselos a todo el mundo, por alguna razón que desconozco los zapatos nuevos me vuelven loca. No me ocurre como a estas personas que podría decirse que los coleccionan, los miman, los viven como extensiones de sí mismos y pueden, en ocasiones, llorar por uno de sus zapatos. No. Mi relación con los zapatos es una relación normal, de persona a zapato y de zapato a persona... cada uno sabemos dónde está nuestro lugar. Pero calzar zapatos nuevos es como calzar aquellos diminutos zapatitos de charol de cuando era una nena.
Entonces mi amiga y yo jugamos a probarnos todos los números y colores, para después volver a esos lindos zapatitos verdes. Sendos zapatos para las niñas que juegan a ser mayores... salimos de la zapatería como locas, visualizándonos, combinándonos... después tomamos un refresco y a casa. Una tarde muy amable. Ahora podemos ir tirarle del pelo al niño que nos gusta y salir corriendo con nuestros zapatos nuevos ¿nos vera bonitas con nuestros zapatos de pulserita verdes? Y si no...que no se note que nos reímos nerviosas y que nos tiemblan las piernas ¡a la carrera!

Esta rana ranita,

tan pequeñita,
ya no salta
los charcos,
quiere estar
limpiecita.
La rana ranita
está enamoradita.

Vio un príncipe

con capa y sombrero,

arriba del carro
del bombero.
La rana ranita
quiere tener
zapatos verdes de tacón
un vestido rojo
y azul sombrero.
¡Ay! rana ranita
¡Quedarás tan guapa!
Busca a la costurera
busca al zapatero
yo tengo una toca
de azul terciopelo
y una rosa roja

que adorn
ará el velo.
Rana ranita,
serás la más preciada joya
del príncipe bombero.
La rana princesita,
de todas
¡¡la má
s bonita!!






Cito: el poemita lo he encontrado en el
blog de Lily buscando una foto para ilustrar este post, y no he podido resistirme, parece que lo huibiera escrito para mi... así que "regresionamos" con todas las de la ley, no?
La foto la encontré en el mismo sitio, pero es de Miss Poxi y la hizo ella para ilustrar el poema de Lily, que invita a todas las niñas que quieran a enviar sus dibujos, yo dejo aquí unas cuantas regresiones, y vamos cerrando el círculo.


Saludos a todos,

Ada, la ranita fea..


;)

11 comentarios:

Santiago Paz dijo...

Creo que habíamos hablado de los olores que nos llevaban a la infancia. Este tema de las "regresiones" creo que lo hablamos acerca de este mismo tema: los aromas que nos llevan a cierta época del tiempo, hacia atrás.


Beijos.


atte:
Paz

Ada.. dijo...

Mr. Paz! diferentes revisiones del pasado... pero qué fácil sería ir a tirarle del pelo, nooo? ahora que tengo mis zapatos verdes de tacón para salir corriendo...
:P

Mike Adán dijo...

Amor = autismo feliz.

Brillante, simplemente brillante ;)

Mike Adán dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Ada.. dijo...

:D

Mike, gracias!

verdad que sí?

;)

te dejo un beso gigante!!

Anónimo dijo...

Croak, Croak! La Fauna de Wonderlands..

Anónimo dijo...

Croak, Croak! La Fauna de Wonderlands..

Ada.. dijo...

croak, croak! sooooy unaaa raanaaaa, quieeeeres ser mi aaaamigooo?

jajajaja!!

nunca conté el chiste de la rana con la boca grande? me recordó tu comentario, José... te dejo un besazo!

xxxxx


o 4!

;)

Anónimo dijo...

Ya me dejaste intrigao...Anda Cuentame el chiste!

Ada.. dijo...

ajajjaja! sombrererillo!! eso un dia con unas cervecitas, no? que están por llegar... si o si?

Anónimo dijo...

Siii...claro...cuando kieras, o mejor dixo en cuanto puedas...jejeje...